Derivado de βαρβαρος griegos (barbaros) que significa "extranjero". Según la leyenda, Santa Bárbara era una mujer joven asesinada por su padre Dióscoro, que luego fue muerto por un rayo. Ella es el patrón de los arquitectos, geólogos, albañiles y artilleros. Debido a su renombre, el nombre entró en uso general en el mundo cristiano en la Edad Media. En Inglaterra se hizo rara después de la reforma protestante, pero fue restablecido en el siglo 19.